Tras el hecho, un grupo de vecinos de la ciudad se congregó para exigir justicia, lo que derivó en disturbios en el barrio Tiro Sur. En medio de los enfrentamientos, la policía intervino y durante la represión, Mabel Viollaz, una de las manifestantes, recibió un disparo de goma en una pierna. La víctima fue rápidamente trasladada al hospital San Benjamín, donde los médicos constataron la gravedad de la herida, que incluyó la rotura de venas y arterias, lo que puso en serio riesgo su vida. Para salvarla, la mujer fue sometida a una cirugía de más de cuatro horas.
El abogado de Viollaz, Martín Jauregui, presentó una denuncia formal contra el accionar del policía ante la Unidad Fiscal de Colón. Ahora, a casi dos meses del hecho, el agente Meyer fue imputado por el ataque y se le citó a indagatoria para los primeros días de mayo de 2025.
En tanto, Mabel Viollaz deberá ser sometida a una nueva intervención quirúrgica, aunque los médicos advierten que no hay posibilidades de recuperar la movilidad de su rodilla afectada.
El caso sigue generando repercusiones en la ciudad y pone en evidencia la creciente preocupación por el uso de la fuerza policial en situaciones de conflicto social. Las autoridades judiciales y locales aguardan el desarrollo de las próximas etapas de este proceso que involucra tanto a la policía como a los vecinos de Colón en un contexto de profunda angustia por la muerte de Agustina Valdez.
