El escenario elegido fue Las Garzas, que no solo brilló por su belleza natural, sino por su gente, que se volcó con compromiso y calidez para hacer de esta jornada una verdadera celebración. Vecinos, amigos, familias completas se dieron cita, simplemente por el placer de compartir un momento significativo, reforzando ese vínculo invisible que da identidad y pertenencia.
Este evento náutico no habría sido posible sin el apoyo silencioso pero esencial de empresas locales como Dinámica, Juan Tamaño Inmobiliaria, Zanandrea, Guerrero Electricidad y Kuper Mecánica, que nuevamente dijeron presente cuando Concordia los llamó a participar.
Desde ya, se valora también el acompañamiento del Municipio de Concordia y del EMCONTUR, que respaldaron la realización de esta etapa del raid. Pero más allá de lo institucional, lo que se respiró fue una manera de vivir la ciudad, de apropiarse de sus espacios y de reconocer el valor de sus paisajes como el Lago, que no es solo fondo de postales sino parte de nuestra identidad.
Este fin de semana quedó claro que Concordia tiene con qué y tiene con quién. El paso del Raid Náutico dejó una imagen para el recuerdo y un mensaje contundente: cuando la ciudad se une, pasan cosas que valen la pena.
con información de Prensa autódromo de Concordia
Redacción de 7Paginas
