Al respecto, el Secretario de Desarrollo Productivo, Federico Schattenhofer, explicó que el conflicto surgió tras la decisión del intendente Francisco Azcué de verificar que quienes perciben horas extras realmente las trabajen. “Armaron un conflicto sin haber planteado el problema antes. La realidad es que se tomó la decisión de que solo se pagará a quienes efectivamente cumplan con las horas extras”, sostuvo el funcionario.
Un sistema sin controles previos
Hasta el momento, el pago de las horas extras se realizaba bajo un convenio sin una supervisión estricta, por lo que la medida despertó molestias entre algunos empleados. Según Schattenhofer, el reclamo se centró en el supuesto trato inadecuado de la persona encargada del control, aunque aclaró que “lo único que está haciendo esta persona es verificar que quienes tienen horas extras, realmente las trabajen”.
El funcionario también enfatizó que nunca recibió una denuncia formal sobre malos tratos. “Si realmente existía una situación de maltrato, nunca fui informado. No se presentó ninguna nota ni reclamo formal, porque de haber sido así, se hubiesen tomado cartas en el asunto”, afirmó.
Intento fallido de diálogo y protesta gremial
Schattenhofer relató que la semana pasada recibió un pedido de audiencia de un referente gremial, quien le explicó que la solicitud era por “cuestiones generales”. Sin embargo, al momento del encuentro, se presentaron 16 personas en lugar de dos o tres, lo que imposibilitó la reunión. “Se retiraron y terminaron armando una asamblea”, detalló el secretario.
Cabe mencionar que en la Municipalidad de Concordia se han hecho recurrentes las denuncias sobre presuntas irregularidades en el cobro de horas extras. Se habla de una práctica instalada en la que algunos empleados declaraban haber realizado horas adicionales sin cumplirlas realmente, lo que habría motivado la decisión del Ejecutivo local de implementar controles más estrictos.
Redacción de 7Paginas