La falta de protección para los docentes que denuncian abusos a menores sigue siendo una asignatura pendiente en Argentina. Un caso emblemático es el de Vanesa Castillo, una maestra santafesina que fue asesinada en febrero de 2018 tras ayudar a una alumna a denunciar un abuso.
Si bien el autor material del crimen fue condenado a prisión perpetua, el instigador nunca fue investigado, dejando una sensación de impunidad y desprotección en el ámbito docente.
Una lucha por la justicia y la protección
A siete años del crimen, la familia de Vanesa sigue reclamando justicia y promoviendo la aprobación de una ley que proteja a los docentes que acompañan a menores en denuncias de vulneración de derechos.
La iniciativa busca garantizar la seguridad y el respaldo de los educadores que, por su cercanía con los estudiantes, muchas veces se convierten en el primer canal de denuncia de casos de abuso infantil.
El rol clave de los docentes y los riesgos que enfrentan
Los docentes son actores fundamentales en la protección de los derechos de la infancia. Su rol no solo implica enseñar, sino también detectar y denunciar situaciones de abuso o maltrato que puedan sufrir los alumnos.
Sin embargo, esta función expone a los educadores a represalias, amenazas y agresiones, no solo por parte de los agresores denunciados, sino también de su entorno. El caso de Vanesa Castillo es un ejemplo trágico de esta vulnerabilidad.
La urgencia de una ley de protección
Para evitar que se repitan casos como el de Vanesa, es fundamental que se apruebe una ley de protección para docentes denunciantes. Esta normativa debería incluir:
Medidas de seguridad para los docentes que intervienen en casos de abuso.
Apoyo psicológico y legal para quienes enfrentan represalias.
Un protocolo de actuación claro y eficiente para las denuncias de abusos.
Un programa de protección estatal para educadores en situación de riesgo.
Un reclamo que no puede esperar
El licenciado Héctor Olivera, especialista en derechos de la infancia, alertó sobre la falta de protección que enfrentan los docentes en ciudades como Concordia, donde varios han manifestado temor al acompañar denuncias de abuso.
La sociedad y las autoridades deben tomar acción urgente para garantizar que quienes velan por el bienestar de los niños no sean desprotegidos ni expuestos. La familia de Vanesa Castillo, junto a docentes y organizaciones, sigue esperando una respuesta.
Redacción de 7Paginas