Sánchez remarcó que la continuidad institucional del ente permitió ordenar procesos que antes se resolvían “a las corridas”, sobre todo entre diciembre y los primeros días de enero. “Hoy llegamos con gran parte del trabajo hecho con anticipación: licitaciones, concursos, ingreso por publicidad, venta anticipada de entradas y acuerdos con las comparsas”, explicó.
Objetivo central: equilibrio económico
El director subrayó que la gestión trabaja alineada con el municipio y con una obligación clara: alcanzar la autosustentabilidad.
“Estamos muy cerca de lograr un equilibrio entre los ingresos generados por el evento y los egresos propios del carnaval. Es un desafío histórico, pero vamos bien encaminados”, afirmó.
En ese marco, señaló que el trabajo con Hacienda, el equipo contable y los presidentes de comparsas fue clave para ordenar números y transparentar cada paso del proceso. También mencionó que este año las propuestas económicas serán un factor determinante en las licitaciones, incluso en rubros sensibles como el de animación.
Servicio de cantinas: cambios tras fuertes reclamos
Uno de los puntos más criticados por el público en ediciones anteriores fue el servicio gastronómico. Sánchez confirmó un cambio total de adjudicatarios, ahora a cargo de un grupo local con amplia experiencia en eventos masivos.
“Nos sentamos a revisar todas las quejas: demoras, precios, variedad, falta de mozos, problemas en las primeras noches. Si la atención es mala, el público se va con bronca y eso impacta directamente en el espectáculo”, dijo.
Aseguró que este año el servicio tendrá estándares mínimos de personal, tiempos y oferta de productos para evitar repetir errores.
Animador, sonido y tribunas: fechas definidas
El lunes próximo, a las 11, se abrirán los sobres del concurso para definir quién será el animador o animadora del Carnaval 2026, además del adjudicatario del alquiler de sillas.
Hacia fines de la semana siguiente se conocerán las propuestas vinculadas al sonido, y también se establecerá la fecha para la muy esperada licitación de tribunas.
Sánchez reconoció que no existe forma de conformar a todos: “En este ámbito nunca se satisface al 100%; lo que para algunos es alegría, para otros es enojo. Nuestro deber es actuar con profesionalismo”.
Reglamento: aclaraciones tras comentarios de Emperatriz
Consultado sobre las declaraciones de Eduardo Cristina en la presentación de la figura de Emperatriz —donde mencionó que ciertas modificaciones “nivelaron hacia abajo”—, Sánchez aclaró que sus palabras fueron malinterpretadas por algunos medios.
Explicó que el reglamento anterior tenía “zonas grises” y puntos confusos que incluso los propios fiscales no podían identificar. Por eso, el ente decidió ordenar, clarificar y reescribir el texto para evitar interpretaciones según conveniencia.
“Hubo un momento en que las reuniones dejaron de ser constructivas. Cada comparsa tiraba agua para su molino. Entonces tomé la decisión: hasta acá llegamos y el ente define el reglamento final. Fue lo más sano para todos”, afirmó.
Medios y polémicas: “apostamos a la indiferencia”
Sánchez también habló del rol de algunos comunicadores que, según expresó, “juegan a que todo salga mal”.
“Preferimos ignorar la mala intención. Entre nosotros nos conocemos, pero el público de afuera consuming ese contenido termina creyendo cosas falsas. Eso perjudica al carnaval”, sostuvo cuando menciono a Conectados en Carnaval.
Aun así, destacó el trabajo de la prensa carnavalera que sostiene la difusión durante todo el año y valoró a los periodistas que critican “con fundamento”, porque —según dijo— muchas observaciones sirvieron para corregir fallas reales.
Mirada final
Antes de despedirse, Sánchez subrayó que el objetivo es ofrecer un espectáculo integral: “El público debe vivir una buena experiencia desde que compra la entrada hasta que termina la última comparsa. Si la gente está bien atendida, el show crece”.
Y concluyó: “Hoy estamos, mañana no. Pero mientras estemos, vamos a dejar todo para que el carnaval siga creciendo”.
Redaccion de 7Paginas
