El condenado fue declarado autor penalmente responsable de gravísimos delitos: Abuso sexual gravemente ultrajante agravado por mediar convivencia preexistente y por ser ascendiente, reiterado; en concurso real con abuso sexual con acceso carnal, también agravado por el vínculo y la convivencia, reiterado; y en concurso ideal con promoción a la corrupción de menores, igualmente agravada por el vínculo y la convivencia.
De acuerdo a lo informado a 7Paginas, se supo que la condena fue impuesta en el marco del legajo “C.D.E. s/Abuso sexual gravemente ultrajante”, tras el juicio oral que se desarrolló bajo la modalidad de jurado popular, siendo este el juicio por jurados número 130 desde la implementación del sistema en Entre Ríos.
Prisión domiciliaria con tobillera electrónica
El magistrado dispuso que el condenado continuará cumpliendo prisión preventiva bajo arresto domiciliario con monitoreo electrónico, hasta que la sentencia quede firme. En esas mismas condiciones había llegado al juicio.
Acusación y defensa coincidieron en el pedido de pena
Durante la audiencia de cesura, realizada el pasado 30 de junio en la sala del Tribunal de Juicio y Apelaciones, tanto la Fiscalía, representada por la fiscal María Occhi, como la defensa técnica, a cargo del defensor oficial Sebastián Arrechea, coincidieron en solicitar la pena que finalmente fue aplicada.
Justicia con perspectiva de derechos
Este fallo vuelve a poner en evidencia la importancia del sistema de juicio por jurados en Entre Ríos, que garantiza la participación ciudadana en el juzgamiento de delitos penales graves, y ratifica el compromiso de la Justicia con los derechos de las víctimas, especialmente en casos que involucran abusos intrafamiliares y situaciones de extrema vulnerabilidad.
El proceso se llevó a cabo con los estándares de legalidad, respeto a las garantías del debido proceso y con la contundencia necesaria para proteger a las víctimas y sancionar con firmeza los delitos sexuales más aberrantes.
