El panorama político para el kirchnerismo en Entre Ríos se encuentra en una situación crítica tras una serie de escándalos judiciales que involucran a figuras clave de los últimos 20 años. El impacto de las investigaciones por corrupción y los recientes acontecimientos ha generado un cimbronazo en la estructura del peronismo provincial.
Urribarri y la sombra de la corrupción
Hace 15 días, la justicia ordenó la detención del exgobernador Sergio Urribarri, junto con el exministro Pedro Báez y Pablo Aguilera, en el marco de causas que ya han marcado un hito en la historia judicial de Entre Ríos. Urribarri, quien ya había sido condenado a 8 años de prisión por corrupción en una causa previa, ahora enfrenta nuevas imputaciones en el caso conocido como Contratos Truchos, en el cual varios de sus exfuncionarios están implicados.
Bordet y sus declaraciones
El exgobernador y actual diputado nacional Gustavo Bordet también está en el ojo de la tormenta. Esta semana, defendió a su predecesor al señalar que “es un exceso que Urribarri esté en la cárcel”. Sin embargo, Bordet enfrenta sus propios problemas judiciales, ya que es investigado por enriquecimiento ilícito, lo que incrementa las críticas hacia su gestión y su cercanía con las figuras cuestionadas.
El escándalo Kueider
El último golpe al kirchnerismo entrerriano llegó este miércoles con la detención del senador nacional Edgardo Kueider, exfuncionario y jefe de campaña de Bordet, quien fue interceptado en Paraguay con más de 200 mil dólares en efectivo sin declarar. Kueider fue detenido en el Puente Internacional de la Amistad, que une Brasil y Paraguay, en un operativo de rutina que derivó en una investigación que podría complicar aún más a la estructura política provincial.
Un golpe a las figuras históricas del peronismo entrerriano
Los tres protagonistas de estos escándalos, Urribarri, Bordet y Kueider, han sido figuras centrales en los últimos 20 años del gobierno de Entre Ríos. Hoy, su situación judicial y las acusaciones que los rodean reflejan una crisis sin precedentes para el kirchnerismo provincial.
La imagen del peronismo en Entre Ríos, que durante décadas fue un bastión político sólido, se encuentra en un momento de fragilidad extrema, con serias implicancias para el futuro electoral y la confianza ciudadana en sus dirigentes.
Por Roberto Molinari, para 7Paginas