Las aves, entre las que se encontraban cardenales, copetes colorados, juancho chiviros, volantineros, jilgueros y cabecitas negras, fueron devueltas a su hábitat natural como parte de un procedimiento de experimente convencional, que además incluyó la destrucción de las jaulas donde eran mantenidas en condiciones de hacinamiento.
Los animales fueron decomisados en el marco de operativos realizados en jurisdicción de la Comisaría Primera, donde los efectivos labraron actas por infracción a la Ley Provincial de Caza N.º 4841. En una de las viviendas allanadas se constató que las aves se encontraban cautivas y en condiciones precarias, presumiéndose su comercialización en el mercado negro.
Desde la Brigada Concordia destacaron a 7Paginas, la importancia de estas acciones para combatir el tráfico ilegal de fauna silvestre y recordaron que la tenencia y comercialización de aves autóctonas sin autorización constituye un delito.
