Tanto Ritondo como Frigerio enviaron mensajes claros y medidos, con fuertes señales políticas sobre el futuro del PRO y su posible alianza con La Libertad Avanza. En declaraciones a este medio, Ritondo, al ser consultado por el conflicto entre Mauricio Macri y Javier Milei, sostuvo que “se deben terminar los personalismos”, marcando una posición conciliadora y dejando abierta la puerta a acuerdos con los libertarios.
Por su parte, Frigerio, en un acto oficial realizado previamente en el Puerto de Concordia, fue más cauto pero no menos contundente. Dijo que esperaría “después de las elecciones del domingo” para hablar del armado electoral rumbo a las legislativas, lo que en retrospectiva podría interpretarse como una señal de que ya preveía un revés electoral del PRO y que el resultado en CABA tendría repercusiones nacionales.
La elección porteña, aunque local, se nacionalizó políticamente, y la contundente victoria de los libertarios deja al PRO en una posición expectante para las futuras negociaciones. En este contexto, los mensajes emitidos por Frigerio y Ritondo desde Concordia cobran una nueva dimensión: ¿fue un intento de amortiguar el golpe político? ¿Un mensaje anticipado a la Casa Rosada sobre la necesidad de unidad frente al avance libertario?, sobre toso en provincia de Buenos Aires, caso contrario en Entre Ríos, donde la sumatoria del poder politico y territorial esta en manos del gobernador Frigerio.
Durante el acto en la nueva sede partidaria del PRO sobre calle San Martín, Ritondo insistió en que “hay muchas cosas en común” entre ambas fuerzas, minimizando el impacto del enfrentamiento Macri-Milei. Frigerio, por su parte, habló de “fortalecer la lucha contra el populismo” y de la necesidad de “unidad”, en lo que parece ser un claro guiño hacia una estrategia de coalición con LLA de cara al armado de listas en Entre Ríos.
Hoy, con la derrota consumada del PRO en la Ciudad de Buenos Aires, esas declaraciones parecen haber tenido más de advertencia que de discurso protocolar. El interrogante está instalado: ¿Ritondo y Frigerio ya sabían lo que se venía?
