Según lo informado por fuentes policiales a 7Paginas, la madre del joven radicó la denuncia formal y aportó datos claves que permitieron identificar a los presuntos agresores: tres personas mayores de edad que, además de golpear brutalmente al hombre, le habrían robado su teléfono celular antes de darse a la fuga.
Con intervención de la Unidad Fiscal, se inició una investigación que incluyó el análisis de registros fílmicos y la realización de entrevistas a testigos. Como resultado, este lunes se concretaron tres órdenes de allanamiento en distintas viviendas de la localidad, donde se secuestraron prendas de vestir que habrían sido utilizadas por los implicados durante el ataque. Algunas de estas vestimentas presentaban manchas de color rojo, presumiblemente sangre, por lo que se dio intervención a la División de Policía Científica.
Los tres sospechosos quedaron supeditados a una causa por «Robo y Lesiones Graves en perjuicio de una persona con discapacidad», mientras continúa la investigación judicial.
El hecho generó una fuerte preocupación en la comunidad, no sólo por la violencia del ataque, sino por tratarse de una víctima especialmente vulnerable. Desde distintos sectores se espera que se haga justicia y se tomen medidas ejemplares frente a esta agresión.